Gold is the new white
¡Hola, hola! Después de un fin de semana en que todo «ha ido todo sobre ruedas»… de bicicleta en la boda de I&J… 😉 (alguno ya habrá visto en Facebook, el divertido montaje que preparamos); y también, un fin de semana muy romántico (muchas love letters en la boda de L&S) aquí estamos de vuelta con el blog y ¡con muchas ganas de contaros cositas!
La boda de la que os hablo hoy, es una boda que todos ya conocéis, que habéis visto miles de fotos, y de la que se habla mucho… pero no quería seguir sin dejarle un huequecito también a nuestra destination wedding más espectacular.
La boda de Lucy y Nick!
Lucy y Nick son una pareja de Nueva Zelanda, que por cuestiones personales viven a caballo entre Londres y Nueva York, y decidieron celebrar su espectacular boda entre avellanos, con nosotros, en Riudecols. Me imagino el momento en el que dos novios tan internacionales deciden marcar en el mapamundi la pequeña población de Riudecols… ¡Me fascina! Como también nos fascinó y halagó un montón que 100 invitados, de toooodo el mundo, se desplazaran para aterrizar aquí, para nosotros fue todo un honor.
Esta especial pareja, nos dejó vía libre para idear su boda, así que nosotros nos inspiramos en el fabuloso vestido dorado de Lucy para crear la deco de la boda. El dorado se convirtió en el leitmotiv de fondo de esta increíble boda. OK, lo admito, con Lucy ahora me une un amor platónico a distancia… hihihi.
El blog Belle and Chic habló de su espectacular look en un post hace unos meses… Lo podéis leer aquí.
Así que finalmente se convirtió en una boda rústica con toques dorados, empezando por el espectacular vestido dorado de Lucy, que dejó con la boca abierta a más de uno, y siguiendo con el resto de la decoración, desde los rincones, las flores y el ramo… cada detallito estaba pensado en dorado, incluso el maquillaje de la novia, hecho por Rebeca Torres. Y por supuesto para combatir el calor, una copita de champán, ¡el otro gran protagonista de esta boda! 😉
La ceremonia se celebró, por primera vez, en frente de la Era, en medio de los avellanos. Sencillamente mágico. ¡Estamos deseando repetir!
Para el guestbook, propusimos a los invitados que jugaran un poco, y que el mensaje de felicitación para los novios, lo enrollaran y lo pusieran dentro de una botellita que después tenían que tirar a nuestra pequeña balsa. ¡Fue increíble ver como se iba llenando y llenando de mensajes! ¡Luego tuvimos que secar alguno que otro… hihihih… pero fue muy bonito!!!
Para el sitting, recuperamos unos platos de porcelana de la abuela de Massimo y de la mía, y los mezclamos, decoramos y colocamos sobre la gran puerta antigua. Una amiga de los novios se encargó de escribir sobre los platos de porcelana los nombres de los invitados. ¡Viva las reliquias de las nonas y omis! 😉
Posteriormente la cena se hizo en la Plaza de los Olivos, al aire libre. En las mesas, sencillas y elegantes, colocamos unos centros con flores blancas mezcladas con flores y elementos naturales pintados en dorado.
Otro lindo detalle de esta boda fueron los regalos a los invitados, que eran semillas que colgamos del «Favour Tree», y estaban marcadas en dos tonalidades diferentes para que los invitados de cada hemisferio del mundo supieran cuales les tocaban y cuando las debían plantar. ¡Es lo que tienen las bodas en las que se une el mundo! 😉
Una boda que sin duda marcó un antes y un después en la historia de nuestra finquita… Lucy y Nick nos llenaron de energía postiva, y nos confirmaron que con volutand e ilusión ¡el mundo es un pañuelo!
Love you, Lucy! <3!
¡Abrazos dorados!
…y a por otro fin de semana llenito de bodas bonitas…
Katinka
Fecha de la boda: Julio 2014
Cátering: Mallol Cátering
Fotografía: Raquel Benito (podéis ver más fotos aquí)
Vestido de novia: Guillermo Molina
Zapatos novia: Burberry Prorsum
Traje novio: Brooklyn Tailors, New York
Alianzas: William Welstead
Maquillaje y peluquería: Rebeca Torres Makeup
Flores y ramo: 5 Floristería
Decoración: L’Avellana